Comida para perros
Secuencia basada en el sketch de SNL
Un matrimonio anuncia piensos para perros. El marido trata de expresar su fe en el producto, pero la esposa se queda anclada emocionalmente en lo malo que era lo que compraban antes, cayendo gradualmente en una crisis depresiva neurótica.
PERSONAJES
Crisis: esposa depresiva con cuadros de ansiedad y pésima autoestima.
Marido: marido paciente que en ocasiones pierde los nervios.
Anunciante: una sola intervención final, puede ser en off.
CRISIS.- Nuestras mascotas son parte de la familia.
MARIDO.- Sí, tenemos hijos, pero los animales nos han acompañado durante toda la vida.
CRISIS.- Y como quiero lo mejor para ellos, hemos cambiado a la comida de perros de Piensos Comebién.
MARIDO.- Al contrario que el resto de marcas, Piensos Comebién nunca escatima en los mejores ingredientes. ¡Tan sólo miren qué comía antes nuestro perro! [Ríe y saca un paquete de pienso de marca tapada]
CRISIS.- ¿Sucedáneo de pollo con maíz amarillo de la tierra? ¿De veras creían que no lo íbamos a mirar?
MARIDO.- Pues lo miramos, y ahora escogemos la mejor elección.
CRISIS.- Ya lo sé, pero lo que me cabrea es que... ¿qué tipo de persona cree que es normal poner un dibujo grande de un pollo en una bolsa donde no hay pollo?
MARIDO.- Tranquila, cariño. ¡Ahora compramos Piensos Comebién!
CRISIS.- ¿Les parece normal? ¡Le estuvimos dando basura a nuestro perro! O sea...
MARIDO.- Amor, ¿estás bien? Parece que vayas a llorar.
CRISIS.- ¡No lo sé, a lo mejor sí!
MARIDO.- No hay nada de qué preocuparse, ya hemos cambiado de marca.
CRISIS.- ¡Es que no es normal! ¿Se creen que soy tonta?
MARIDO.- No es que crean que somos tontos, es que no creen que nos importe tanto. Pero sí nos importa.
CRISIS.- ¡Que te den, marca blanca! ¿Qué más quieres de nosotros? ¿Quieres acostarte con mi marido? ¿Es que no vas a parar hasta dejarle el culo en carne viva?
MARIDO.- No creo que sea para tanto, su único fallo es querer ahorrar costes de producción.
CRISIS.- ¿Ahorrar costes? ¡Pero si su pollo ni siquiera es pollo!
MARIDO.- ¡Algo tiene que haber! Quizá haya minúsculas trazas de pollo, ¡pero hay pollo!
CRISIS.- ¡Ah, minúsculas trazas! ¡Entonces soy yo, que me he vuelto loca! [Al perro] ¿Has oído, Chispa? ¡Minúsculas trazas! ¿Estaban ricas?
MARIDO.- Sara, no sé qué más quieres que haga.
CRISIS.- ¡Quiero que te enfades! ¡Quiero que por una vez te pongas de mi lado!
MARIDO.- ¡Ya estoy enfadado!
CRISIS.- ¡No, yo te vi una vez enfadado y ahora no lo estás! ¡Sé un hombre!
MARIDO.- ¡Soy un hombre! ¡No oses dudar que soy un hombre! ¡Yo lo que intento es mejorar la situación!
CRISIS.- ¿Cómo, cómo?
MARIDO.- ¡Cambiando de marca! ¡Compramos otra marca desde hace tres semanas! ¡Estamos mejor!
CRISIS.- ¡No es suficiente! ¡Quiero que venga un empleado de la otra marca, que mire a mi perro a la cara y que le pida perdón! ¡Y que me pida perdón a mí, y que pida perdón a toda la familia! ¡Y que se vaya a la puta calle! ¡Por mí, que se pegue un tiro!
MARIDO.- Cariño, nunca van a hacer todo eso.
CRISIS.- ¡Son unos mentirosos, unos hijos de la grandísima...! [Grita desesperada]
MARIDO.- ¡Calla! ¡Asustas al perro!
CRISIS.- ¡No creo que al perro le queden neuronas, lleva toda la vida comiendo mierda!
MARIDO.- ¡Cálmate de una vez!
CRISIS.- [Grito animal]
MARIDO.- ¡Vete a dar un paseo, que te dé el aire!
[La mujer se aleja hasta otro punto para serenarse. Vuelve con su marido al final del siguiente texto.]
CRISIS.- Me rindo. Me doy por vencida. Ellos ganan. No me quedan fuerzas para luchar. Marca blanca, ven y llévate a mi perro si quieres. Quédate con mi casa. Me rindo.
MARIDO.- Amor, el perro ahora come pienso del bueno. ¡Estamos bien!
CRISIS.- ¿Estamos bien? Me gustaría creer que yo te importo...
MARIDO.- Cariño, tú y yo empezamos a comprar Piensos Comebién... ¡en cuanto supimos que existía!
CRISIS.- De acuerdo...
ANUNCIANTE.- Esta familia se cambió a Piensos Comebién. Los mejores ingredientes. La mejor calidad. Demuéstrele a su mascota lo mucho que le importa.
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